Mil Islas: Tour en helicóptero y vistas aéreas del Castillo Boldt

4.99

(255 reseñas)

¿Cómo es la experiencia?

La verdad, no pensé que me pondría nervioso hasta que vi el helicóptero esperándonos en el helipuerto de Mil Islas. En la sala había un murmullo tranquilo, gente ajustándose los auriculares y mirando el río. Nuestro piloto, Dave, tenía una voz tan calmada que te daba confianza al instante—bromeó sobre su “suerte con el clima canadiense” mientras nos abrochábamos los cinturones. Al principio los auriculares se sentían un poco raros y apretados, pero en cuanto despegamos, solo podía pensar en lo pequeño que se veía todo abajo, como si alguien hubiera esparcido confeti verde sobre un vidrio azul.

La palabra clave aquí es “tour en helicóptero por Mil Islas,” pero en serio, es difícil explicar lo que se siente al ver el Castillo Boldt desde el aire. Dave señaló Heart Island—dijo que se parece exactamente a un corazón si lo miras desde el ángulo correcto (entrecerré los ojos y tenía razón). El castillo casi brillaba bajo el sol. Hubo un momento en que nos quedamos suspendidos cerca del puente Thousand Islands, y se veían los coches avanzando lentamente entre Canadá y Estados Unidos. Me hizo pensar en cuánta gente cruza sin darse cuenta de lo que tienen justo debajo.

También pasamos cerca de la Torre 1000 Islands—qué curioso que algo que parece tan alto en tierra se vea tan pequeño desde aquí arriba. El viento hizo vibrar mis auriculares un instante y pude oler una mezcla de aceite de motor con aire del río (no desagradable, solo… real). Dave no paraba de contar datos, pero a veces lo desconectaba solo para ver cómo la luz del sol bailaba sobre el agua. Esa vista sigue en mi mente cuando el ruido de la ciudad me abruma.