Recorrerás las calles antiguas de Split y entrarás a las bóvedas de Diocleciano con una guía local que domina tanto la historia real como la de Juego de Tronos. Escucharás anécdotas detrás de cámaras, estarás donde “dormían” los dragones y evitarás perderte en esos pasillos de piedra (Ana te mantendrá en ruta). Dos horas que te harán ver Split con otros ojos.
Lo primero que noté fue el eco: nuestros pasos en las bóvedas de Diocleciano rebotaban en la piedra como si estuviéramos en un mundo secreto bajo tierra. Nuestra guía, Ana, sonrió al ver a mi amiga aferrada a su cuaderno de Daenerys (me contó que ha visto desde peluches de dragones hasta capas completas). Allí abajo olía un poco a humedad, pero no de mala manera, más bien a tierra vieja y cera de vela. No podía dejar de pensar en cómo esas escenas de Meereen se veían mucho más grandes en la pantalla, pero aquí podías tocar las frías paredes por donde marchaban los Inmaculados. En un punto, Ana señaló “aquí es donde guardaban a los dragones” y, sinceramente, se me pusieron los pelos de punta. La luz esa tarde tenía un tono dorado raro, que suavizaba todas las asperezas.
Después paseamos por el casco antiguo de Split — la plaza del Peristilo estaba llena de locales y turistas, pero Ana logró abrirnos camino entre todos. Entre las historias de Juego de Tronos, nos soltaba datos reales de historia (no esperaba interesarme por los emperadores romanos, pero sus relatos eran fascinantes). En un momento intentó enseñarnos a pronunciar “Vestibul” en croata; Li se rió tanto de mi intento que hasta un vendedor ambulante se unió a la broma. La ciudad tiene capas — ese mundo de fantasía encima de siglos de historia real. Si lo piensas mucho, da un poco de vértigo.
Aún recuerdo el frescor bajo esas piedras y cómo Ana hacía pausas antes de contarnos qué escena había ocurrido allí, como si quisiera que lo adivináramos primero. Al final dejé de intentar hacer fotos y simplemente escuché. Si eres fan aunque sea un poco, o solo quieres ver Split con otros ojos por un par de horas, este tour a pie de Juego de Tronos vale la pena. Sobre todo las bóvedas — hay algo en ese lugar que se queda contigo.
El tour dura aproximadamente 2 horas de principio a fin.
Sí, la entrada a las Bóvedas de Diocleciano está incluida en la reserva.
Sí, los niños pueden participar siempre que vayan acompañados por un adulto.
Los bebés y niños pequeños pueden ir en cochecito o carrito durante el recorrido.
Sí, visitarás varios escenarios auténticos usados para las escenas de Meereen en Split.
Hay opciones de transporte público cerca del lugar de inicio.
Se camina un poco; se recomienda calzado cómodo, pero es apto para todos los niveles de condición física.
No, no se permiten mascotas en este tour a pie.
Tu entrada cubre la visita a las Bóvedas de Diocleciano, donde se rodaron muchas escenas icónicas, y contarás con un guía local profesional que conoce a fondo tanto la historia de Split como su papel en Juego de Tronos. Solo tienes que venir listo para caminar; todo lo demás está organizado.
¿Necesitas ayuda para planear tu próxima actividad?