Sentirás el corazón acelerado al despegar sobre la bahía de San Francisco en este tour en hidroavión, sobrevolando el Golden Gate, Alcatraz, Muir Woods y más, con un piloto local que guía cada giro. Todos tienen asiento junto a la ventana para disfrutar las vistas y quizás alguna que otra risa nerviosa.
No esperaba que me sudaran las manos solo por subir a ese pequeño hidroavión en la bahía de San Francisco. La piloto, Lisa, sonrió y nos dijo que no nos preocupáramos—ella ha hecho esto cientos de veces. Sentí una mezcla rara de emoción y nervios al abrocharme el cinturón (confieso que lo revisé dos veces). El motor rugió y de repente solo olía a agua salada y ese toque aceitoso típico de los puertos. Rozamos la superficie del agua y, de repente, despegamos—y la ciudad empezó a hacerse pequeña detrás de nosotros.
Es difícil explicar lo distinto que se ve todo desde arriba. Ves el Golden Gate en mil fotos, pero verlo curvarse justo debajo es otra historia. Lisa señaló Muir Woods—desde aquí solo un parche verde, pero nos contó que de niña solía ir a caminar por ahí. Volamos sobre Marin Headlands y Stinson Beach; la arena parecía casi blanca contra el azul del mar. En un momento vi Angel Island y pensé en todas esas historias de inmigrantes que pasaron por ahí. El viento movía un poco las ventanas, lo que me hizo agarrarme más fuerte al asiento (mi pareja se rió), pero la verdad es que me sentí segura—Lisa tenía todo bajo control.
Paseamos por encima de Alcatraz—la Roca realmente parece solitaria allá afuera—y luego sobre Fisherman’s Wharf y Pier 39, donde casi podías ver gente saludando si te esforzabas. Intenté sacar una foto pero desistí; a veces es mejor simplemente disfrutar el momento. Esa luz sobre la ciudad al atardecer… todavía la recuerdo. Los treinta minutos pasaron volando. Al aterrizar en la bahía, sentí las piernas temblar, pero de la emoción.
El vuelo dura unos 30 minutos desde el despegue hasta el aterrizaje.
Sobrevolarás el Golden Gate, Alcatraz, Muir Woods, Marin Headlands, Angel Island, Fisherman’s Wharf y más.
Sí, se necesitan al menos dos adultos por reserva para este tour en hidroavión.
Los bebés pueden ir en el regazo de un adulto; para niños pequeños se recomienda llevar asiento infantil.
Sí, cada pasajero tiene su propio asiento junto a la ventana para disfrutar las vistas sin obstáculos.
No, el check-in es en la base de hidroaviones antes del vuelo.
Este tour no se recomienda para personas con lesiones en la columna debido a los movimientos en el despegue y aterrizaje.
El hidroavión tiene capacidad para hasta seis pasajeros por vuelo.
Tu día incluye el check-in en la base de hidroaviones cerca de la bahía de San Francisco, seguido de un vuelo panorámico de 30 minutos con un piloto local experimentado—todos con asiento junto a la ventana para disfrutar las vistas antes de regresar juntos a tierra firme.
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