Navega por el Bósforo en tu propio yate privado con cena incluida, haciendo paradas para fotos en lugares emblemáticos como la Torre de la Doncella y el Palacio de Dolmabahce. Es un plan relajado, personal y fácil de adaptar para momentos especiales o una tarde tranquila con amigos.
Nos encontramos con la tripulación justo en el muelle de Bebek, fácil de ubicar incluso con el bullicio matutino de las cafeterías cercanas. El yate estaba impecable y fresco, nada cargado como otros barcos que he probado antes. Se sentía una suave brisa salada del agua y se escuchaban gaviotas peleando por migas de simit en la orilla. Nuestro guía, Cem, nos ofreció bebidas frías mientras nos acomodábamos. Conocía cada recoveco del Bósforo y señalaba detalles curiosos, como cómo la mezquita de Ortaköy se tiñe de rosa justo antes del atardecer o qué lado del estrecho recibe más sol en primavera.
Al pasar bajo el Puente del Bósforo, tomé fotos de la Fortaleza de Rumeli, cuyas viejas paredes de piedra brillaban casi doradas con la luz de la tarde. Navegamos frente al Palacio de Dolmabahce y el Palacio de Beylerbeyi; Cem nos contó historias de sultanes otomanos que organizaban fiestas aquí (al parecer, eran fanáticos de los dulces). La cocina preparó pescado fresco a la parrilla, simple pero delicioso, con limón y hierbas, y también había opción vegetariana. El aroma se esparcía por la cubierta mientras pasábamos junto a la Torre de la Doncella. En un momento, me asomé y vi delfines persiguiendo la estela del barco, algo que no esperaba para nada.
La ruta es flexible: puedes hacer un recorrido rápido de 2 horas hasta Ortaköy si buscas un plan romántico, o extenderlo a tres horas para disfrutar vistas de la Torre de la Doncella y Santa Sofía desde el agua. Nosotros nos tomamos nuestro tiempo cerca del Palacio de Küçüksu, un lugar más tranquilo, alejado de los grandes ferris. Si quieres extras, como pastel de cumpleaños o música en vivo, solo tienes que pedirlo con anticipación y lo organizan. Al final, vimos Estambul iluminado desde ambos lados, escuchamos algunas leyendas locales de Cem y nos fuimos con la sensación de haber vivido la ciudad de verdad, no solo de haber tachado puntos turísticos.
¡Claro! Solo dinos si prefieres carne a la parrilla, pescado de temporada o una opción vegetariana al hacer la reserva.
Si las condiciones lo permiten y lo solicitas con anticipación, se pueden hacer paradas para nadar en ciertas rutas.
Por supuesto, los bebés pueden ir en el regazo de un adulto o en cochecito a bordo. El barco es apto para familias.
Se puede organizar recogida y regreso desde otros puntos si se solicita con tiempo (puede tener un costo adicional).
Tu crucero incluye agua embotellada, una bebida fría a elección, carne o pescado fresco a la parrilla (o comida vegetariana), todos los impuestos y tasas, además de acceso a baños a bordo. La tripulación amable se encarga de todo para que solo te relajes y disfrutes Estambul desde el agua.
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