Central Park: Tour en pedicab por lugares de películas y paradas para fotos

4.97

(259 reseñas)

¿Cómo es la experiencia?

“¿Te has dado cuenta de cómo la ciudad simplemente desaparece aquí?” Eso nos dijo nuestro guía, Samir, mientras pedaleaba desde Columbus Circle. Yo aún sostenía mi café, pero el ruido del tráfico se desvaneció tan rápido que parecía parte de una película. Las ruedas susurraban sobre los senderos y de repente pasábamos junto a parejas con bagels, un corredor en pantalones cortos (¡en marzo!) y, detrás de nosotros, capté un leve aroma a nueces tostadas. No esperaba sentirme tan... ligero. Quizá era el sol que por fin salía después de días grises.

Samir señaló The Dakota y nos contó que John Lennon y Yoko Ono vivieron ahí; por un momento sentí un escalofrío pensando en toda esa historia concentrada en un solo edificio antiguo. En Strawberry Fields, hicimos una pausa junto al mosaico “Imagine”. Había flores esparcidas y alguien tocaba canciones de los Beatles cerca. Era más tranquilo de lo que imaginaba; la gente se quedaba escuchando o tomando fotos, pero casi nadie hablaba. Un silencio respetuoso, ¿sabes?

Lo que más me gustó fue llegar al Bow Bridge—Samir lo llamó “el puente de las propuestas” con una sonrisa. Se ofreció a sacarnos una foto (se agachó para encontrar el ángulo perfecto) y nos mostró dónde filmaron ‘Tienes un e-mail’. Intenté recordar la escena, pero más que eso noté la madera bajo mi mano, lisa y gastada por años de manos como la mía. Pasamos rápido por la fuente Bethesda (donde se han rodado tantas películas) y luego paramos en el carrusel, donde los niños gritaban emocionados sobre caballitos centenarios. Todo olía a palomitas y a cera de madera antigua.

Pensaba que un tour en pedicab por Central Park sería muy turístico, pero la verdad es que fue como ver Nueva York con los ojos de alguien que vive aquí y sabe qué árboles dan mejor sombra o dónde puedes colarte a jugar pickleball si tienes suerte. Al final no quería bajarme; solo quería dar una vuelta más alrededor del lago, con los botes de remos meciéndose tranquilos a lo lejos.