New Orleans: Tour en bici por French Quarter y Garden District

4.90

(159 reseñas)

¿Cómo es la experiencia?

No esperaba reír tanto en un tour en bici por New Orleans, la verdad. Desde el primer momento, nuestro guía (se llamaba Marcus, el dueño del tour) me dio un casco y dijo: “No te preocupes, juntos esquivaremos los baches.” El French Quarter me golpeó primero con ese aroma a beignets recién hechos y música de metales saliendo de puertas abiertas. Paramos en Jackson Square donde un viejo tocaba la trompeta bajo un cielo azul impresionante, y Marcus nos contó sobre piratas y pintores que solían rondar esas calles. Intenté repetir “Vieux Carré” como él, pero me salió un desastre — se rió y dijo que sonaba como su primo de Baton Rouge.

Seguimos rumbo a Congo Square, un lugar del que solo había leído antes. Allí se siente un silencio especial por un momento — casi puedes escuchar tambores si te quedas quieto el tiempo suficiente. Marcus explicó cómo nació el jazz justo ahí, no en un teatro elegante, sino al aire libre con todos escuchando. El recorrido no fue difícil (unos 14 km en total), aunque mis piernas protestaron un poco cuando entramos al Garden District. De repente todo era sombra de robles gigantes y esas mansiones antiguas con balcones de hierro forjado. Señaló una casa donde vivió una estrella de cine — ya no recuerdo quién porque me distrajo un gato dormido en el poste de la verja.

La última parada grande fue el Cementerio Lafayette No. 1. No pudimos entrar, pero nos quedamos en la entrada mientras Marcus contaba por qué aquí la gente se entierra sobre la tierra (algo de las inundaciones — tiene sentido). El aire olía a musgo y a algo dulce que no supe identificar. Había flores metidas en las grietas de la piedra; seguro alguien pasa seguido. Terminamos cerca de Frenchmen Street, donde la música en vivo empezó justo al caer la noche — se sentía vibrar hasta en el manillar.

Todavía recuerdo ese instante en Congo Square cuando todo se quedó en silencio salvo risas lejanas y pájaros volando arriba. Si tienes curiosidad por New Orleans o quieres conocerla sin prisas, este tour en bici es tu mejor opción — además te dan agua embotellada y ponchos por si llueve (que llovió cinco minutos y luego volvió a salir el sol).