Clase Práctica de Cocina Marroquí en Fez con Visita al Mercado

4.43

(7 reseñas)

¿Cómo es la experiencia?

El aire de la mañana en Fez siempre mezcla el aroma del pan recién hecho con especias lejanas; es imposible no notarlo al entrar en la medina. Nuestra guía, Samira, nos esperaba junto a Bab Boujloud y nos llevó directo al laberinto de puestos del mercado. Nos detuvimos en un pequeño puesto donde un anciano molía comino; el olor me llegó antes que su imagen. Elegir verduras aquí es toda una experiencia: los vendedores gritan los precios, alguien te ofrece una ramita de menta para oler, y terminas probando aceitunas que no pensabas comprar.

Con las bolsas llenas (juro que nunca había visto tantos tipos de pimentón), caminamos hacia la cocina, una habitación luminosa escondida tras un patio con azulejos. La chef, Fatima, nos recibió con té y nos mostró cómo preparar todo desde cero. Nos explicó por qué los hilos de azafrán se añaden al final del tagine y nos dejó amasar la masa para el pan tradicional khobz. Hacer zaalouk fue más desordenado de lo que esperaba—berenjenas por todas partes—pero sabía mejor que cualquier ensalada que haya probado en casa. El almuerzo fue ruidoso y relajado; todos nos sentamos juntos a compartir lo que habíamos hecho, mojando pan en las salsas mientras Fatima contaba historias sobre las recetas de su abuela.